Evite estos errores presupuestarios
Evitar los errores presupuestarios es crucial para mantener la salud financiera y alcanzar sus objetivos. A muchas personas les cuesta ceñirse a un presupuesto o plan de gastos debido a errores comunes como subestimar los gastos, no tener en cuenta los gastos irregulares y no ajustar el presupuesto o plan cuando cambian las circunstancias. Al reconocer estos errores y planificar en consecuencia, puede crear un presupuesto o plan de gastos realista y flexible que le ayude a gestionar su dinero de forma más eficaz y evitar el estrés financiero.
El aumento desaprovechado
Después de tu evaluación anual de rendimiento, tu jefe acuerda un buen aumento de sueldo. Es una gran noticia y quieres celebrarlo, así que decides comprarte algo bonito. Al fin y al cabo, el aumento te lo pagará. ¿Verdad? Puede que sí. Puede que no.
Un aumento de sueldo es un reflejo de tu experiencia, tu ética laboral y tu capacidad de contribuir a la empresa. Es agradable que tu jefe se dé cuenta de tu esfuerzo y te recompense por ello. Pero antes de gastar esos ingresos extra, asegúrate de que entiendes cuánto más vas a llevar realmente a casa.
Después de impuestos y cotizaciones, ¿qué parte de este aumento te llevarás a casa en cada nómina? ¿Ha aumentado la inflación alguna de tus facturas o gastos? ¿Recibes un ajuste por el coste de la vida además del aumento? Si no es así, el aumento tendrá que cubrir cualquier incremento normal del coste de la vida, como el aumento del precio de los alimentos o de la prima del seguro del coche.
Cuando tengas una idea realista de cuánta más renta disponible te aportará este aumento cada mes, podrás decidir cómo quieres gastarla. Empieza por analizar tus objetivos financieros. ¿Tiene préstamos estudiantiles que quiere pagar antes? ¿Estás ahorrando para el pago inicial de una casa? Alcanzar estos objetivos tendrá mucho más sentido que gastar el aumento en una compra impulsiva.
El derroche del verano
Incluso si durante la primera mitad del año trabaja con diligencia para ceñirse a su presupuesto o plan, el "derroche veraniego" podría arruinar la segunda mitad.
Los días más largos, el aire más cálido y los compromisos sociales hacen del verano el momento perfecto para relajarse y socializar. Pero dejarse llevar demasiado por la actitud relajada del verano puede dar lugar a facturas que no estás preparado para pagar.
Derroche: Todas las bodas de tus amigos fuera de la ciudad.
Arréglalo: Compartir coche y habitación de hotel con otros invitados a la boda que conozcas.
Derroche: Una enorme factura de comestibles para hacer una barbacoa.
Arréglalo: Proporcione la carne y pida a sus invitados que traigan bebidas y guarniciones.
Derroche: Un viaje espontáneo de fin de semana al lago.
Arréglalo: Acampar en el lago en lugar de reservar una cabaña o un hotel.
Si sabe que sus gastos de ocio, viajes y comida serán mayores en verano, intente tenerlo en cuenta a principios de año ahorrando un poco más. Así, cuando surja la oportunidad de ser espontáneo, no tendrás que pellizcar para conseguirlo.
También puedes buscar eventos gratuitos y ventas locales en tu zona. Algunas ciudades acogen películas o música al aire libre en verano, y muchas tiendas de comestibles ofrecen rebajas en alimentos aptos para la barbacoa durante los meses estivales.
Desaparición de efectivo
Acceder a la banca digital o consultar el extracto bancario mensual es la mejor forma de controlar tus gastos y asegurarte de que te ciñes a tu plan. Cada vez que pasas la tarjeta, obtienes la fecha, el nombre del comerciante y el importe gastado, pero incluso los presupuestadores más meticulosos pueden acabar desconcertados por el destino de parte de su dinero.
Suscripciones
¿Alguna vez te has suscrito a una prueba gratuita y has olvidado cancelarla? ¿Te cuesta seguir la pista de tus servicios de streaming? Con tantas opciones de suscripción, puede ser fácil perder la pista de lo que has contratado. Revisar todas tus transacciones recurrentes cada mes puede ayudarte a asegurarte de que tus suscripciones siguen mereciendo la pena.
La banca digital de Centra puede ayudarte. La sección "Gastos" del menú "Bienestar financiero" puede ofrecerte una lista de tus gastos recurrentes para que compruebes si hay suscripciones furtivas.
Retiradas de efectivo
Algunos comercios no aceptan tarjetas y, en algunas situaciones, es más fácil pagar en efectivo. A menos que tengas memoria fotográfica, es importante que guardes los recibos de las compras en efectivo o que apuntes dónde lo utilizas. Llevar un registro de las transacciones en efectivo te ayudará a saber dónde lo gastas para no excederte en una categoría concreta.
Si una determinada área de su presupuesto o plan de gastos tiende a requerir dinero en efectivo, haga una retirada para cubrir ese presupuesto a principios de mes. Puedes guardar el efectivo y los recibos de la retirada en un sobre o en una carpeta de efectivo y revisarlos a final de mes. También puedes hacer un seguimiento de tus compras en efectivo en una nota de tu teléfono, anotando cuánto has retirado y cuándo, y añadiendo cada transacción a la nota a medida que gastas el efectivo.